Experiencia clienteReflexionesVivencias

Sin emoción no hay aprendizaje. A la hora de realizar una formación lo importante es impactar emocionalmente en todos y cada uno de los participantes para despertar el compromiso de cambio con un objetivo indiscutible: que la formación sea útil y sostenible, fácilmente trasladable al día a día de los participantes.

La teoría se olvida, sin embargo, aquello que experimentamos, que sentimos en nuestro cuerpo, queda anclado en nuestra mente. Es por ello que se hace necesario e imprescindible utilizar técnicas de facilitación sistémica y herramientas como Metalog Training Tools para impactar y despertar conciencia en los participantes.

Jugar serio permite conectarnos con nuestro yo auténtico. Para ello debemos crear escenarios impactantes, creando un laboratorio dónde poder aprender sin miedo a equivocarse, jugando. Como aprendemos cuando somos niños.

Con ello conseguimos múltiples resultados de forma inmediata:

  1. Estimular los procesos de aprendizaje en todos los sentidos para conseguir experimentar la teoría.
  2. Trabajar de manera vivencial habilidades como comunicación, liderazgo, trabajo en equipo, cambio, creatividad, confianza…
  3. Impactar como amplificadores del aprendizaje. Presentar teorías complicadas a los participantes de forma clara y fácil de memorizar, incrementado la sostenibilidad en los resultados.
  4. Implementar dinámicas, por medio de metáforas, que simplifican el trabajo. Se establece una segunda realidad, paralela a la aparente realidad del grupo, la cual incluye aspectos que permiten a los participantes pasarlo bien y sentirse felices a través de la experimentación. Pero más allá de eso, los participantes pueden manifestar un comportamiento auténtico, aquél que se muestra en la vida diaria.
  5. Transferir temas a la práctica. En la implementación de los proyectos de aprendizaje se presentan experiencias que son fácilmente transferibles a la situación diaria de los participantes.
  6. Interacciones sistémicas. Implican aspectos desde múltiples perspectivas: círculos de retroalimentación, contextualización de los significados y auto-organización.
  7. Crear situaciones positivas. Los participantes apoyan al formador, consultor o coach, movilizando recursos, brindando retroalimentación y creando un ambiente positivo para el aprendizaje.
  8. Impactar en contextos diferentes y con diversos objetivos para el grupo. El objetivo principal es la puesta en escena del proyecto de aprendizaje, para que los participantes puedan visualizar sus ideas.

En Fides estamos convencidos de que lo importante es impactar emocionalmente en todos y cada uno de los participantes para asentar de manera inmediata a la par que duradera los conocimientos y habilidades que se pretenden transmitir. Nuestro objetivo es que lo aprendido sea fácilmente trasladable al día a día de nuestros clientes de forma que trascienda más allá de los días de formación y cada participante interiorice lo aprendido de manera personalizada.

Nuestra puesta en práctica de herramientas y metodologías es sin duda toda una vivencia que permanece perenne en cada participante.

 

Gemma Mateu